 Casi sale mal
En Ebay encontramos a la venta una clase 215. Tenemos tan pocas locomotoras diésel, aparte de la V 63 que en realidad está obsoleta para nuestra época, y las V 100 y V 200 son tan
frecuntes que se encuentran en todos lados. Un modelo como éste sería justo lo que necesitamos.
Sobre todo porque tiene nuestro diseño favorito para la tracción, a saber, un motor central con árboles cardán a dos ejes motrices cada uno delante y detrás. Con tanta fuerza de tracción,
los cuatro neumáticos de tracción son casi demasiado.
Pero en realidad cada rueda suministra la corriente al interior a través de contactos deslizantes, es decir, la mejor alimentación posible. Lo que nos llevó a sospechar de la avería de la
locomotora precisamente aquí, sigue siendo al menos desconcertante.
Por sólo 24,50 € con gastos de envío incluidos, lo has adivinado, la pieza se ofrecía como "pieza de repuesto/defectuosa". Tendría que haberlo advertido, porque la imagen que
acompañaba a la oferta mostraba la carcasa y la subestructura por separado.
Jaja, el funcionamiento de la luz fue reportada como defectuosa. Como si eso pudiera molestarnos, ya que siempre instalaremos LED blancos/rojos. Pero luego una frase que debería
habernos hecho tomar nota.
'El motor funciona cuando el cable de alimentación se conecta directamente'. Con un poco de astucia, llegamos a la conclusión de que había un defecto en la alimentación eléctrica entre
las ruedas y el motor.
Cuando la locomotora llegó a nuestras manos, un contacto deslizante estaba atascado, de alguna manera a mitad de camino. Por supuesto, se retiró el eje y el contacto deslizante se
apoyó en él correctamente.
Y luego sin carcasa en la pista de pruebas. El motor hizo un verdadero esfuerzo, pero la locomotora no se movió. Una situación que realmente puede estropearnos el ánimo de victoria.
Ahora tenemos que hacer una pausa aquí para otra historia. Porque por casualidad ya habíamos conseguido dos bogies, que compramos a un precio comparativamente alto.
Es un viejo sueño nuestro acercarnos a la construcción de una locomotora o un tren completo. Como hasta ahora han habido muy pocas aproximaciones a esto, también hemos impreso
bastante poco en 3D.
Trabajar en nuestro coche de dos pisos y cubrirlo con láminas impresas no nos parece muy favorable en este momento. Preferimos probar suerte con piezas pequeñas pero finas.
Debemos llegar al punto en que estemos tan afinados en el manejo de nuestro programa CAD, que las piezas grandes dejen de ser un problema. De esta manera se usaría menos
filamento. Para nosotros no es divertido desechar objetos experimentales.
Y si es inevitable, entonces más bien piezas muy pequeñas con poca pérdida de filamento. Así que la compra de los dos bogies con reductores fue en realidad pensada como el
comienzo de la autoconstrucción.
Entonces la idea es comprar un pequeño motor japonés con dos salidas y construir e imprimir, de algún modo dos, árboles cardán con los manguitos adecuados desde el motor hasta los
bogies.
De los bogies pasamos a la locomotora, que al final incluso salió 0,5 € más barata. Pero eso sucede a menudo. Si acabas de comprar algo, está garantizado que luego lo encontrarás
aún más barato.
Aquí fueron precisamente los bogies de la locomotora los que resultaron defectuosos. Y no solo que el manguito de transmisión en el eje de entrada estaba suelto.
Si miras de cerca la caja reductora, el tornillo sin fin de la parte superior está tan desgastado que ya no engrana con el engranaje de abajo.
Sorprendentemente, en los bogies que compramos, este tornillo sin fin es de latón. Así que ahí tenemos el problema. ¿Qué haríamos ahora sin estos no están en buenas condiciones?.
Esperando a que se ofrezca de nuevo en algún sitio, esto podría demorar una eternidad. En cualquier caso, la locomotora podría estar lista para volver a funcionar por un total de 49,50 €.
Esto sería una locura, ¿verdad?.
No, la historia no termina aquí, porque ahora nuestra ambición se ha despertado aún más. ¿Sería posible crear un nuevo tornillo sin fin y nuevos engranajes con nuestra impresora 3D?
Después de todo, podríamos usar nuestro cabezal de impresión con una boquilla de diámetro 0,2 mm y el filamento de material ABS, que necesita mucho más calor para procesarse.
Esto podría ser capaz de soportar la tensión.
Estos son los planes, pero al menos la décima locomotora potente funciona a la perfección. Hay que reconocer que hubo un poco de suerte en la compra. Estuvo a punto de salir mal. Así
que, debemos tener un poco más de precaución al comprar piezas defectuosas.
Mientras tanto, hemos descubierto la descripción de una posibilidad en nuestro programa de CAD Creo, para que éste cree directamente una combinación de tornillo sinfín a engranaje.
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