Si se regula un motor de cuatro tiempos de gasolina por una placa de aceleración, entonces es por regla el vacío que se crea en el colector de admisión suficiente. El resto de motores, incluyendo los motores diesel necesitan una bomba de vacío. En ambos casos se transmite con el motor en marcha el vacío a través de una válvula de retención en ambas cámaras del servofreno. Este se crea mediante el vaivén de una membrana flexible en el medio del cuerpo de la bomba. Según la fuerza que ejerce sobre el pedal de freno entra más o menos presión de aire a través de un filtro (mire las flechas) a la cámara derecha y de este modo ayuda al conductor/a con el accionamiento del freno.

Para ello se determina con el diámetro de entrada, el que aun hoy en día se mide en pulgadas, lo fuerte que puede ser el servofreno accionado. En caso de que con los vehículos pesados no tienen el suficiente espacio para un mayor diámetro de entrada, entonces se les tiene que proporcionar tres o incluso cuatro cámaras para ello. Si tiene un sistema hidráulico ya instalado, se puede lograr el trabajo de apoyo mediante un servofreno hidráulico de tamaño bastante más pequeño.

El pedal de freno se conecta a través del vástago con el émbolo marrón y su junta tórica negra. Tanto el émbolo como la junta tórica tienen una distancia minima a sus superficies de apoyo. Esto causa que en ambos espacios ejerza un vacío. La conexión hacia afuera esta cortada, al tener contacto el émbolo marrón con la junta tórica negra.

Al frenar parcialmente se desplaza el vástago del émbolo hacia la izquierda. El émbolo marrón se alza de la junta tórica negra. El muelle verde la desplaza y a causa de esto sella una cámara de la otra. Al mismo tiempo se llena (parcial) la cámara de la derecha con aire a presión. Esto tarda tanto tiempo, como se necesita para desplazar la membrana con su caja de control entera hacia la izquierda, hasta que el émbolo marrón se acople otra vez en la junta tórica negra. El aumento de la presión en la cámara de la derecha, depende entonces de la fuerza con la que se pisa el pedal.

Al frenar fuerte no se puede desplazar la junta tórica negra mas hacia la izquierda de lo que esta. Por eso se alza de forma permanente del émbolo marrón. A causa de esto ejerce en la cámara de la derecha una presión completa.