Tarea

Solo fue posible cuando salió al mercado el sistema de inyección Bosch. Hizo que el motor diesel sea lo que todavía lo distingue hoy en día, un accionamiento robusto con consumo minimizado. Inicialmente fue diseñado y construido para el camión. Solo en 1936 comenzó la era del automóvil diésel. El mismo procedimiento con un tiempo de diferencia aún mayor se repitió más adelante en la introducción de la inyección directa.

Función

Evidentemente crea más dificultades el motor de gasoil para automóviles por su comportamiento. Pero del acabado fino no se puede ver nada por el alrededor del ejemplar que se muestra arriba. En cambio deja vislumbrar una cantidad de tecnología de aquellos tiempos. Por su número de bujías incandescentes se deja reconocer sus cuatro cilindros. Los datos técnicos se pueden leer aquí. Con un árbol de levas inferior se debieron impulsar las válvulas a través de balancines. Por delante (izquierda) se reconoce el hacinamiento del ventilador rígido y por detrás (derecha) el volante de inercia, por lo tanto casi ninguna diferencia con el motor de gasolina.

Esto se pone interesante, cuando nos dedicamos a la bomba de inyección. Esta ya tiene el dispositivo de bombeo manual y el filtro con ventanilla de vidrio. Desde ahí conduce una tubería hacia el filtro principal al otro lado del motor y retrocede para terminar a la parte izquierda de arriba en la bomba de inyección en línea. La instalación de los siempre igual de largos conductos de inyección aún no tenían el diseño elegante de nuestra época.

Totalmente desconocida es la regulación. Se echa en falta el regulador centrífugo, el que como se sabe se ocupa en un motor de gasoil de regular al menos el ralentí y el tope de revoluciones. Si se observara el motor por la otra parte, llamaría la atención la trampilla de regulación en la entrada del aire, la que no se diferencia mucho a la del acelerador de un motor de gasolina. Aquí comienza la regulación neumática con su trabajo, porque entre la trampilla de regulación y el motor se crea un vacío, el que hace mover sobre una membrana adecuada la varilla de regulación de forma autónoma. A causa de esto no se necesita aquí un regulador centrífugo.

Lamentablemente era este sistema de regulación construido en los años sesenta sensibles a las fugas. Porque dentro de la membrana de regulación (parte derecha de la bomba) presionaba un muelle a la varilla de regulación en dirección de "carga completa". El vacío se ocupaba de la fuerza opuesta. En caso que este vacío fallaba a causa de una fuga de aire, entonces ganaba terreno el muelle creando consecuencias incalculables para el motor. 10/08